El 1º de enero de 1905 se crea la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés, hoy presidida por Camilo Suárez. En este informe algunos datos de la entidad que “sigue apostando fuertemente como desde hace 110 años a seguir trabajando con ímpetu”, esfuerzos permanentes, profesionalidad y prudencia.
La AHRCC, fundada en 1905, es considerada una de las primeras entidades empresariales de la Argentina. Ya en 1896, varios empresarios del sector habían formado una agrupación. La llamaron “Centro de Dueños de Hoteles y Restaurantes de la Capital”. Se habían unido para oponerse a un desmedido aumento de tarifas eléctricas. Al poco tiempo, se vieron en la necesidad de dar respuesta a un pedido de cambios en las condiciones laborales formulado por el personal. Para resolver la cuestión, entonces, se formó una comisión paritaria. Pero, la adopción de soluciones individuales por parte de algunos establecimientos, determinó la disolución de la incipiente agrupación.
Afortunadamente, no ocurriría lo mismo con la entidad, la cual, desde 1905 hasta hoy, viene desarrollando una tarea sin interrupciones de ninguna naturaleza. Incrementando, al mismo tiempo, año tras año los servicios que brinda sus asociados, cuyos establecimientos constituyen un sólido sector de notable importancia para el crecimiento económico y social. Porque son actividades que participan activamente en la generación de empleo, con un aporte al fisco por demás significativo y un efecto multiplicador que se extiende a un amplio abanico de proveedores.
El acta fundacional fue suscripta en la Confitería del Águila, que a comienzos del siglo XX estaba ubicada en la calle Florida 178. Su propietario era Santiago Canale, quien presidió una comisión provisoria. Lo acompañaban Lorenzo Semino, del Hotel Mayo, como secretario; y, como tesorero, Andrés Luzio, en cuyo restaurante de Bartolomé Mitre al 400, veinte días más tarde, se planificaron las acciones iniciales y se procedió a la distribución de tareas. Acababa de ver la luz una de las primeras entidades empresarias del país.
A pesar de los tiempos nada fáciles en el aspecto económico, la AHRCC sigue apostando fuertemente como desde hace 110 años a seguir trabajando con ímpetu ante evolución y exigencias cuya satisfacción requieren esfuerzos permanentes, procedimientos criteriosos y la toma de decisiones que deben ser adoptadas con profesionalidad y prudencia.