El doctor en Economía y director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) disertó en el Ciclo de Encuentros virtuales, organizado por FEHGRA, sobre el “Contexto Económico Actual y el Panorama 2021”. Se refirió a la caída de la economía, del empleo y del salario. Dijo que la hotelería y la gastronomía tienen una caída mucho más significativa que el promedio de la economía.
“Quiero solidarizarme con todo el sector de gastronomía y hotelería, que está teniendo un año muy negativo. Lamentablemente no traigo buenas noticias”, dijo el doctor Nadin Argañaraz, al inicio de su charla, y en este marco habló del contexto económico actual y de 2021. “Estamos en tiempos de récords negativos desde el punto de vista económico, con caída histórica de la actividad económica; con un gran déficit fiscal, nos tenemos que remitir hasta 1975, año del Rodrigazo, para encontrar un déficit fiscal tan elevado; una emisión de dinero récord desde la hiperinflación del ´89”. Como contrapartida, destacó la importancia de no haber caído en el cuarto default que Argentina -en los últimos 20 años-, con el logro de la reestructuración de la deuda: “Tenemos una oportunidad, tenemos oxígeno, que no significa que va a venir plata, pero por lo menos no tendremos que pagar en los próximos años”. Indicó que la situación es crítica tanto en lo económico como en lo social, y que el sector hotelero y gastronómico tiene una caída mucho más significativa que el promedio de la economía.
“Lo que todos nos preguntamos es si hay un plan de salida. En mi criterio, no lo hay. Tenía la esperanza que el proyecto de Presupuesto marcara una hoja de ruta. Ni el Gobierno ni la oposición, ni el conjunto de la clase dirigente están trabajando para delinear una hoja de ruta que nos incorpore a todos los argentinos. Esto potencia la incertidumbre. En este contexto nos vamos acercando al 2021”.
Empleo, salario y capacidad de consumo
Repasando la economía, Nadin Argañaraz dijo: “Hace 10 años que Argentina no crece, su economía está estancada. Así nos encontró la pandemia. Este año, hubo una caída significativa de la economía en abril, que luego con las flexibilizaciones se fue recuperando, pero se pudo ver en julio que la recuperación perdió fuerza. No vamos a volver rápido al nivel pre pandemia”.
Expuso sobre tres escenario de recuperación, optimista, moderado y pesimista, y agregó que, según su opinión, el escenario de reactivación va a ubicarse entre la postura pesimista y moderada: “Recién en 2023 Argentina podría recuperar el nivel pre pandemia, que era un nivel de actividad generado por una recesión de tres años”. Explicó que la caída de la actividad tiene efectos sectoriales: “Una de las anclas antiinflacionaria que posee el país está relacionada a los salarios, que justamente están haciendo de ancla, con los sindicatos convalidando esta situación ante la gran caída de empleo. Según los últimos datos disponibles, el empleo registrado en Argentina entre febrero y junio de este año tuvo una caída de 300 mil puestos. El empleo privado explica prácticamente toda esa caída”. Resumió que la disminución de puestos de trabajo se complementa con una caída importante del salario real, que ha perdido un 21% del poder adquisitivo con respecto al 2017 que alcanzó un máximo. Indicó que la marcha del empleo y del salario es importante para la capacidad de consumo de los trabajadores en Argentina: “Este indicador viene cayendo desde 2017 en línea con la caída del salario real, que se acentúa por los 300 mil puestos menos. Hay una muy escasa capacidad de recuperación del salario real, por ende, la economía va a volver con una capacidad de consumo reducida, que va a priorizar consumos básicos”. Sobre el tipo de cambio para el turismo receptivo, dijo que el incentivo es alto para quien tiene dólares y puede llegar a Argentina.
Políticas
Nadin Argañaraz habló del refinanciamiento de la deuda privada del Estado, de la deuda con el Fondo Monetario Internacional, de la caída de la recaudación, del gasto público, de la emisión de pesos, de las reservas del Banco Central. También se refirió a la base monetaria y al ordenamiento del esquema de asistencia que brinda el Estado: “Hay que hacer la asistencia porque si no la economía se desmorona mucho más desde lo económico y desde lo social”.
Subrayó la importancia de encontrar una solución de fondo y concreta como sociedad, de definir el rol del Estado en la economía y su eficiencia en el gasto público, y de repensar la carga tributaria orientada a disminuir el nivel de informalidad en la economía, que, a su criterio, viene creciendo año a año y generando una competencia desleal para los que están en la formalidad.