La disertación formó parte del Ciclo de Encuentros virtuales, organizado por el Departamento de Capacitación y Formación Profesional de FEHGRA, a cargo de la doctora Ana María Miñones. Se refirió a los cuidados inmediatos para personas accidentadas, a la Maniobra de Heimlich, a la Reanimación Caridopulmonar, y al uso del Desfibrilador Externo Automático.
Docente en la Cátedra de Primeros Auxilios en la Facultad de Turismo de la Universidad Abierta Interamericana (UAI), el licenciado Mariano Sassano dijo que el objetivo general de los Primeros Auxilios es promover conocimiento teórico y práctico como piedra angular para salvar una vida; y que la capacitación práctica es muy importante para el buen desenvolvimiento en el momento del accidente: “Cuando más demoro en actuar, el daño es mayor” dijo. Se refirió a los cuidados inmediatos, adecuados y provisionales prestados a las personas accidentadas o enfermas de manera inminente y repentina hasta que llegue el personal calificado o centro asistencial.
Protocolos y Maniobras
Mariano Sassano se refirió a la importancia del tiempo, de reaccionar de manera rápida eficaz, y a las existencias de protocolos de actuación, que van a permitir conservar la vida, evitar complicaciones psicofísicas, ayudar a la recuperación. Explicó que parte de la tarea es llamar a los centros de ayuda calificada. A la hora de la llamada de emergencia, es imprescindible brindar la mayor cantidad de información sobre la situación. Reconoció la importancia de agregar en la agenda del celular los cuatro números importantes para solicitar ayuda: 911 Policía, 100 Bomberos, 107 Ambulancia y 103 Defensa Civil.
“El pánico a la hora de actuar es una barrera que no deja proceder. Hay estrategias psicológicas para poder abordar esta temática”. Con empatía, animó los más de 200 empresarios hoteleros y gastronómicos que participaron del encuentro virtual a capacitarse, junto a sus equipos, ya que las capacitaciones sistemáticas en la materia y la actualización en Primero Auxilios va quitando los miedos sobre cómo proceder.
Entre las normas y consideraciones generales dijo que es necesario actuar si se tiene seguridad de cómo hay que proceder; conservar la tranquilidad para actuar con serenidad y rapidez; y actuar en un escenario seguro. Además, hay que brindarle seguridad emocional a la víctima consciente. Al realizar la valoración general en la víctima hay que evitar hacer movimientos innecesarios. Es preciso controlar los signos vitales, como la temperatura corporal. Y no luchar contra lo desconocido: insistió que, si no se conoce cómo actuar, no hacerlo: “No es ayudar por ayudar, sino que hay que tener un marco de referencia” para no perjudicar la situación.
Se refirió a la Maniobra de Heimlich, un procedimiento de primeros auxilios para desobstruir el conducto respiratorio, bloqueado por un trozo de alimento o cualquier otro objeto pequeño. Se trata de una técnica efectiva para salvar vidas en caso de asfixia por atragantamiento.
Habló de la Reanimación Caridopulmonar (RCP), que es una técnica muy simple que consiste en aplicar compresiones rítmicas sobre el pecho de una persona que está sufriendo un paro cardíaco. Esta maniobra permite garantizar que fluya la sangre oxigenada por sus órganos vitales, hasta que llegue la atención médica.
También se refirió al uso del Desfibrilador Externo Automático (DEA), que es dispositivo electrónico portátil que diagnostica y puede ayudar a restablecer el ritmo cardíaco cuando una persona sufre un paro cardíaco. Hoy los desfibriladores están en organismos públicos, estadios, aeropuertos, terminales de transportes, clubes, gimnasios o piscinas, entre otros lugares.