El dueño del establecimiento gastronómico Te Conozco Orozco, de Formosa, y flamante presidente de la Filial local participó en el Ciclo “Entre Colegas”, que se desarrolla por la cuenta de Instagram de FEHGRA. Entrevistado por el dirigente empresario porteño Daniel Prieto, Matías Orozco se refirió a su estrategia para mantener su operación en pie, a pesar de la pandemia.
Tiene 36 años y es cocinero profesional, recibido en la Escuela del Gato Dumas. Hace algunos años, fundó el establecimiento Te Conozco Orozco, que impulsó una renovación en la gastronomía formoseña. En la víspera de su asunción como Presidente de la Filial FEHGRA Formosa, Matías Orozco participó del Ciclo “Entre Colegas”, que se vio en vivo por la cuenta de Instagram de la Federación. Fue acompañado, en calidad de entrevistador, por el dirigente porteño y coordinador de la Región CABA, Daniel Prieto.
El encuentro se desarrolló el lunes 30 de noviembre, y fue la entrevista número 25 del Ciclo creado por el Departamento de Capacitación y Formación Profesional de FEHGRA, a cargo de la prosecretaria Ana María Miñones, como parte de su estrategia para estar en contacto directo con dirigentes y empresarios hoteleros y gastronómicos de todo el país, en esta etapa impactada por la pandemia.
El recambio dirigencial
Sobre su trabajo dirigencial, dijo que asume con responsabilidad la posición de Presidente en esta difícil coyuntura: “Estamos ansiosos. Los dirigentes Patricio Evans y Ronny Ojeda me hicieron la propuesta, y me pareció bien empezar ahora. Hoy nos damos cuenta de la importancia de la institución. Nosotros estuvimos muchísimo tiempo cerrados. Cuando tuvimos que reclamar algo y pedir la apertura, ahí nos dimos cuenta de que la única herramienta valedera para proponer algo es la Federación, no hay otro camino. Además, está bueno lo que hace nuestra Filial. Después de cada período, se renueva la Comisión con gente nueva, con el espíritu de no permanecer en los cargos, es muy correcto. Se invita a participar a nuevos dirigentes, y se queda parte de la Comisión anterior para orientar y dar el marco de continuidad. Se trabaja muy bien, tenemos dialogo con el Gobierno. Creo que hay que impulsar más la comunicación con los socios. En estos ocho meses cerraron algunos establecimientos, otros cambiaron de dueños o se reinventaron en panadería, por ejemplo. Hay que hacer una evaluación. Nos toca trabajar mucho para la reapertura, juntarnos todos, y en muchas cosas empezar de cero. Vamos a seguir la misma línea de los Presidentes anteriores -Ronny Ojeda, presidente saliente, y Patricio Evans-”. Daniel Prieto rescató además la importancia de la incorporación de nuevas generaciones en la estructura de las entidades: “Valoramos la inyección de sangre joven”.
Rosario y Te conozco Orozco
Matías Orozco explicó que desde chico le gusta cocinar: “Cuando terminé la Secundaria, en 2001, pensé en seguir una carrera que me diera rápida salida laboral. Entre las opciones que había, la que más me gustaba fue la Gastronomía. Estudié Cocinero Profesional en la Escuela del Gato Dumas, en Rosario. Era una carrera de tres años, muy linda, que ofrece muchas herramientas. A los seis meses, en una pasantía, conocí el trabajo en una empresa de catering, y me encantó. Comencé a vivir la adrenalina de la cocina…”. En esa etapa, trabajaba en la temporada alta del sector gastronómico, y el resto del año en catering. Se quedó en Rosario hasta el 2009, y experimentó todos los puestos de una cocina: “Fui pasante, estuve en compras, me desempeñé como jefe de sector de gastronomía saldada y jefe de cocinas. Al principio le tenía un poco de miedo al despacho, no es una tarea fácil. Pero una vez que empezás, ya no querés salir más. En la época de la Gripe H1N1 se cayeron muchos eventos, por lo que decidí entregar el mando del trabajo a otra persona y volver a Formosa. Al tiempo tuve la posibilidad de comprar el fondo de comercio de un bar en donde tocaban bandas, ubicado en el centro de Formosa, a media cuadra de la avenida principal”. Explicó que decidieron cambiar el perfil de clientes y dar un quiebre en la gastronomía tradicional típica de una ciudad chica: “Empezamos con aguas saborizadas, picadas, cervezas, tragos. De a poco fuimos ampliando la carta a pedido del cliente, siempre respetando la calidad y la mejor atención. No es sencillo imponer un estilo, pero a la larga representa un punto a favor”. Explicó que el comensal le respondió positivamente, eligiendo a Te conozco Orosco, un lugar único, con una propuesta gastronómica diferente. Con el tiempo, ampliaron el establecimiento, sumando el local de al lado, y apuntalados especialmente por la amplia vereda, que puede ser utilizada durante todo el año, debido al óptimo clima de la ciudad.
El equipo y la pandemia
Además de Matías y su esposa Daniela, trabajan en el establecimiento su madre Victoria, otros integrantes de su familia y 10 empleados: “Abrimos a las 7 de la mañana y cerramos a las 4 de la madrugada. Además, al mediodía, teníamos contratado el servicio de viandas para los empleados de un Banco. Es un lugar chico, resulta más rentable mantenerlo abierto durante 20 horas al día”.
Cuando comenzó la pandemia por COVID-19 vivieron sentimientos encontrados: “Primeros nos relajamos, pero, cuando vimos que pasaban 15 días y seguíamos sin abrir, nos asustamos. El delivery no genera un movimiento importante, por lo que empezamos a pensar en incrementar la venta de viandas. El Banco redujo su personal presencial, porque muchos trabajan en modalidad home office. Con este escenario, comenzamos a publicitar las viandas por Redes Sociales y a precios muy convenientes, con delivery incluido”.
¿El resultado de la estrategia? Se adaptaron y crecieron, sumaron clientela. Hoy alquilan una cocina extra solo para la elaboración de las viandas: “Abrimos esta puerta, y la vamos a mantener post pandemia como una nueva unidad de negocio. Preferimos desarrollarlo y dar trabajo. Mantengo el personal, que está muy bien capacitado. Bajé mis ganancias, pero estoy cumpliendo con mis prioridades. Ahora estamos solicitando poder abrir los establecimientos todos los días de la semana, hasta el momento solo es posible de viernes a domingo. Y además de noche podemos trabajar perfectamente al aire libre. A partir de ahora, se habilitaron los eventos culturales de hasta 100 personas”.
Daniel Prieto comenta sobre la idiosincrasia del formoseño de disfrutar de las bondades del clima, con experiencias al aire libre, y lo consulta sobre los protocolos sanitarios que implementaron. “Tenemos protocolos con reservas; trazabilidad de contactos, es decir, sabemos quién se sentó y en qué turnos; implementamos medidas sanitarias, como el uso del alcohol y el lavado constante de manos”. Dice que las reservas de mesas son por turnos de dos horas y que, en general, el cliente acompaña sin problemas: “Mi trabajo es recibir a la gente, explicarles las medidas, el horario. Ayudar al equipo. Tenemos una línea de atención muy prolija. Nuestros mozos son muy buenos”, dijo, y destacó especialmente a Ramón y a Mario, “dos emblemas de lo que es la buena atención”.
Agregó que los tres días que tienen abierto los establecimientos trabajan muy bien, en general, con dos turnos de cocina: “La gente quiere salir. Hace siete meses que estábamos encerrados y en Formosa no tenemos circulación viral. Los hoteleros la están pasando muy mal. Muchos pusieron el cartel de venta, muchos cerraron, llegó tarde la solución para el sector. Si se abren las fronteras, es bueno para nuestro sector, pero no sabemos cuál es el horizonte. Es la situación en la que estamos”.
Formosa, hermosa
Antes de concluir el encuentro, habló de Formosa, destacando especialmente la oferta gastronómica variada y la hotelería: “Nuestra ciudad es muy segura, caminás tranquilo a la hora que sea, es linda, divertida, con un excelente clima durante todo el año. Acá casi no llueve, podemos trabajar en espacios al aire libre todo el año. Y además tenemos el Bañando La Estrella”, un paraíso ubicado a 300 km de la capital provincial, que ofrece flora desmesurada y una rica fauna, y fue elegido el año pasado como una de las siete maravillas argentinas, en un concurso de la organización 7 World Wonders, que se realizó por primera vez en América Latina.